Podríamos decir que el Ego, Ahamkara, es la consciencia individual, el sentido del Yo a través del cual los seres humanos nos concebimos a nosotros mismos como individuos concretos separados de los demás seres. Es el pensamiento básico y primario que tiende a identificarse con el cuerpo, la mente, el intelecto y la forma. A través del Ego se origina el deseo, el apego, el rechazo, el sufrimiento,… pero también la voluntad de evolucionar y desarrollar todo el potencial que reside en nuestro interior.
Los aspectos negativos del ego, en sus tendencias tamásicas y rajasicas hacen aflorar el sentimiento de “mío” y el egoísmo, así como sensaciones dolorosas que generan miedo, falta de confianza en uno mismo, celos, ira, intolerancia, negatividad, indecisión…
Sin embargo, el aspecto positivo del Ego, cuando está en calma, influenciado por Satwa genera la noción de YO SOY, un sentimiento de unidad con el entorno y los demás seres que hace aflorar naturalmente la tolerancia, la compasión, el altruismo, la felicidad, el Amor,… convirtiéndose en el vehículo que nos aleja de la dualidad y nos acerca a la experiencia de sentir que somos la propia existencia infinita.