Yoga Nidra es una técnica de meditación – relajación que podría traducirse como sueño psíquico o sueño consciente. Con Yoga Nidra conseguimos que nuestro cuerpo y nuestra mente obtengan un completo estado de relajación, incluso podría parecer que estamos dormidos, pero en realidad nuestra consciencia está activa, funcionando a un nivel mucho más profundo.
Yoga Nidra es un método accesible a todo el mundo que no requiere ningún conocimiento previo. Tiene la “ventaja” de que se practica en posición tumbada a diferencia de otras técnicas de meditación. La comodidad que proporciona estar tumbado facilita la relajación física y mental para profundizar en la consciencia, aunque también puede suponer un inconveniente ya que la propia comodidad de la postura pude favorecer la aparición del sueño, siendo este el gran obstáculo al que se enfrentará el practicante. Dormirse en Yoga Nidra es relativamente fácil y aunque en ocasiones sucederá, será importante tratar de mantener una consciencia lúcida.
Yoga Nidra no requiere ningún esfuerzo de concentración, las instrucciones que el alumno recibe de la mano del profesor van fortaleciendo de una forma relajada la atención del practicante. Lo único que hay que hacer es seguir la voz del instructor. Una característica de este método es que las instrucciones se dictan de forma ágil, pudiendo parecer al principio un poquito rápidas, si uno no está acostumbrado. Esta agilidad en la dinámica del ejercicio es fundamental para que la atención no se disipe.
Mediante los diferentes elementos que configuran la técnica de Yoga Nidra se induce un estado de profunda relajación física, mental y emocional que hace posible que la consciencia se establezca en un estado intermedio entre el sueño y el estado de vigilia, fluctuando entre los estados de introversión y extroversión. Al principio resultará difícil mantenerse continuamente en ese límite, la consciencia, en ocasiones oscilará hacia el mundo de los sentidos y otras se decantará hacia el sueño. Con una práctica sistemática, la consciencia tenderá a establecerse en el estado de Nidra, donde la mente se vuelve muy receptiva.
Con Yoga Nidra obtenemos un total equilibrio físico, mental y emocional, un estado de quietud y calma interna muy profundos que nos ayudará a despertar todo un gran potencial que yace dormido en nuestro interior. Con Yoga Nidra conseguiremos ir purificando los contenidos mentales almacenados en el subconsciente e inconsciente, todo aquello que nos gobierna desde las capas más profunda de la mente, transformando la forma en que nos relacionamos con nosotros mismos y con el entorno. Yoga Nidra permite conectar con ese espacio profundo donde se encuentran escondidas las soluciones a todos nuestros problemas y conflictos.
Además, 1 hora de Yoga Nidra equivale a 4 horas de sueño en la noche!!
Aunque a estas sesiones pueden acudir personas que sólo deseen practicar Yoga mental de forma aislada, recomendamos compaginar semanalmente Yoga Nidra con otras técnicas de Hatha Yoga, especialmente, junto al trabajo corporal de asana para que el método resulte más eficiente y las técnicas utilizadas se asimilen e integren mejor. Ambas formas de Yoga unidas (Yoga físico y Yoga mental) proporcionan la armonía de una práctica integral y completa por lo que es aconsejable realizarlas juntas cada semana.